¿Por qué tengo que viajar tan lejos para bailar?
Creamfields Buenos Aires 2007 (Buenos Aires - Noviembre 2007)
Había que decidir donde tomarse unas vacaciones; las opciones eran múltiples y las discusiones familiares también, pues no había acuerdo sobre el destino; finalmente (para variar) la música fue una de las variables que pesó en la decisión. Iríamos con un grupo de amigos a una tour musical por Buenos Aires donde uno de los puntos era el Creamfields, fiesta imperdible y cuyo line up bonaerense para el 2007 era bastante más potente que el resto de Latinoamérica.
Con una semana de trajín y continuas salidas, el sábado nos agarra bastante cansados -la noche anterior en Niceto fue bastante agitada y el abundante almuerzo no ayudo mucho-; además la noche no tenia las mejores perspectivas: un clima poco generoso y un transito bastante congestionado, hacían que la llegada al autodromo de Buenos Aires sea accidentado (además que el taxista de hecho nos engancho unos cuantos pesos de mas en la tarifa). Luego de la odisea que representó la larga cola de gente en la entrada, la pelea por unas cervezas fue casi inhumana (además del precio – mas caras que en el UK fácil), pues el desorden imperante hacia que la gente se abalanzara ante los kioscos forrados por una cerca de alambres, como si se tratase de animales furiosos tras una jaula. Lo peor era que en el escenario principal, ya se escuchaban algunos golpes de batería cuando yo forcejeaba por unas latas. Era la banda de James Murphy que comenzaba la noche con el potente “Us v Them”, invitando a todos a una noche de completo rock (¿?), o lo que su propuesta sea. Con un combo bastante afiatado, pero con Murphy un poco alejado de la gente (luego me entere que estaba algo enfermo), en poco más de una hora, LCD Soundsystem repaso casi la totalidad del “Sound of Silver” (DFA / 2007) y nos mojó con todos sus fluidos conocidos: fortaleza punk rock , beat funk y elementos electro, cerrando con el derrame acido del clásico “Yeah”, uno de los pocos temas de sus trabajos anteriores que lanzo en el escenario (junto a “Tribulations”).
De pronto a las 12:00 am, mientras los chirridos de los agudos lanzados por los neoyorquinos aun taladraban mi cerebro, el frío se iba alejando, y los cuerpos se iban acercando. Todos querían ver a The Chemical Brothers. “Galvanize” dio el gatillazo inicial a una fusilada de interminables hits y una puesta en escena impecable con probablemente uno de los mejores visuales actualmente. En esas casi dos horas de concierto, más de 60,000 personas se arremolinaron al escenario principal, y con el espíritu de barra brava. Desde “Out Of Control” hasta “Star Guitar” completaron una primera hora memorable, donde hicieron bailar extasiadamente a toda la masa, mientras que el ímpetu bajó en la segunda hora, con la revisión preponderante de los temas menos pulsantes y mas big beat de sus primeros dos álbumes.
A las 1:45 am, queríamos bailar y entre las diversas opciones (Digweed, Dubfire), no iba a pasar la oportunidad de ir a la verbena organizada por los 2 Many DJ’s. Nuevamente los hermanos Dewaele hicieron añicos la tradición del DJ electrónico, pinchando rodajas vinílicas impensadas en cualquier fiesta actual. El factor sorpresa al máximo (apelando también al su enciclopedismo pop de los últimos 40 años) es la consigna de estos belgas, que con total desparpajo entrelazaron himnos actuales de Simian Mobile Disco, Justice o Digitalism con eclécticos oldies como Human Resource, New Order (aunque “Blue Monday” es casi un clásico en sus sets), Human League (momento cumbre de la noche cuando todos los que estábamos en la carpa cantamos “Don’t You Want Me”) o el cierre con un deslumbrante “Killer Queen” (Queen) que de alguna manera nos hizo amanecer a las 3:45 a.m.
De ahí en adelante principalmente lo que hicimos fue tratar de escondernos del frío (4°C), asi que luego de 20 minutos al aire libre con Carl Cox en el main stage, buscamos refugios en las carpas, así que la siguiente hora y media nos la pasamamos saltando de una en una y disfrutando entre otros a Tiefschwarz, Craig Richards, y Pat Mahoney (en solitario ante la abdicación de James Murphy).
Así a eso de las 5 a.m. (lamentablemente sin ver el amanecer) regresamos al hotel en una ruta irrepetible, pues fui al último que dejaron luego de pasear por todo Buenos Aires dejando a los demás compinches.
Este repaso parece una repetición de lo que escribí cuando los vi en el del festival de Motel Mozaique, pues creo que LCD Soundsystem da uno de esos pocos espectáculos con músculo y beat irrepetibles en otras bandas punk/funk y 2 Many Dj’s es probablemente la mejor fiesta actualmente, tan heterogenia y variada que no hay pierde. Si los encuentran en algún lugar del mundo, no se pierdan.
Por ultimo, si están por decidir algunas vacaciones por Noviembre, Buenos Aires es una buena opción, además que gozan del cartel de este festival que tradicionalmente se hace en ese mes, pueden encontrarse con una ciudad excitante y con muchas opciones.
Con una semana de trajín y continuas salidas, el sábado nos agarra bastante cansados -la noche anterior en Niceto fue bastante agitada y el abundante almuerzo no ayudo mucho-; además la noche no tenia las mejores perspectivas: un clima poco generoso y un transito bastante congestionado, hacían que la llegada al autodromo de Buenos Aires sea accidentado (además que el taxista de hecho nos engancho unos cuantos pesos de mas en la tarifa). Luego de la odisea que representó la larga cola de gente en la entrada, la pelea por unas cervezas fue casi inhumana (además del precio – mas caras que en el UK fácil), pues el desorden imperante hacia que la gente se abalanzara ante los kioscos forrados por una cerca de alambres, como si se tratase de animales furiosos tras una jaula. Lo peor era que en el escenario principal, ya se escuchaban algunos golpes de batería cuando yo forcejeaba por unas latas. Era la banda de James Murphy que comenzaba la noche con el potente “Us v Them”, invitando a todos a una noche de completo rock (¿?), o lo que su propuesta sea. Con un combo bastante afiatado, pero con Murphy un poco alejado de la gente (luego me entere que estaba algo enfermo), en poco más de una hora, LCD Soundsystem repaso casi la totalidad del “Sound of Silver” (DFA / 2007) y nos mojó con todos sus fluidos conocidos: fortaleza punk rock , beat funk y elementos electro, cerrando con el derrame acido del clásico “Yeah”, uno de los pocos temas de sus trabajos anteriores que lanzo en el escenario (junto a “Tribulations”).
De pronto a las 12:00 am, mientras los chirridos de los agudos lanzados por los neoyorquinos aun taladraban mi cerebro, el frío se iba alejando, y los cuerpos se iban acercando. Todos querían ver a The Chemical Brothers. “Galvanize” dio el gatillazo inicial a una fusilada de interminables hits y una puesta en escena impecable con probablemente uno de los mejores visuales actualmente. En esas casi dos horas de concierto, más de 60,000 personas se arremolinaron al escenario principal, y con el espíritu de barra brava. Desde “Out Of Control” hasta “Star Guitar” completaron una primera hora memorable, donde hicieron bailar extasiadamente a toda la masa, mientras que el ímpetu bajó en la segunda hora, con la revisión preponderante de los temas menos pulsantes y mas big beat de sus primeros dos álbumes.
A las 1:45 am, queríamos bailar y entre las diversas opciones (Digweed, Dubfire), no iba a pasar la oportunidad de ir a la verbena organizada por los 2 Many DJ’s. Nuevamente los hermanos Dewaele hicieron añicos la tradición del DJ electrónico, pinchando rodajas vinílicas impensadas en cualquier fiesta actual. El factor sorpresa al máximo (apelando también al su enciclopedismo pop de los últimos 40 años) es la consigna de estos belgas, que con total desparpajo entrelazaron himnos actuales de Simian Mobile Disco, Justice o Digitalism con eclécticos oldies como Human Resource, New Order (aunque “Blue Monday” es casi un clásico en sus sets), Human League (momento cumbre de la noche cuando todos los que estábamos en la carpa cantamos “Don’t You Want Me”) o el cierre con un deslumbrante “Killer Queen” (Queen) que de alguna manera nos hizo amanecer a las 3:45 a.m.
De ahí en adelante principalmente lo que hicimos fue tratar de escondernos del frío (4°C), asi que luego de 20 minutos al aire libre con Carl Cox en el main stage, buscamos refugios en las carpas, así que la siguiente hora y media nos la pasamamos saltando de una en una y disfrutando entre otros a Tiefschwarz, Craig Richards, y Pat Mahoney (en solitario ante la abdicación de James Murphy).
Así a eso de las 5 a.m. (lamentablemente sin ver el amanecer) regresamos al hotel en una ruta irrepetible, pues fui al último que dejaron luego de pasear por todo Buenos Aires dejando a los demás compinches.
Este repaso parece una repetición de lo que escribí cuando los vi en el del festival de Motel Mozaique, pues creo que LCD Soundsystem da uno de esos pocos espectáculos con músculo y beat irrepetibles en otras bandas punk/funk y 2 Many Dj’s es probablemente la mejor fiesta actualmente, tan heterogenia y variada que no hay pierde. Si los encuentran en algún lugar del mundo, no se pierdan.
Por ultimo, si están por decidir algunas vacaciones por Noviembre, Buenos Aires es una buena opción, además que gozan del cartel de este festival que tradicionalmente se hace en ese mes, pueden encontrarse con una ciudad excitante y con muchas opciones.
LCD Soundsystem @ Creamfields Bs As 2007 - "Us vs Them"
The Chemical Brothers @ Creamfields Bs As 2007
2 Many Dj's @ Creamfields Bs As 2007
Para mi Chemical era la mejor rumba electronica hasta que vi a Daft Punk. Ya viste a Daft Punk
Aun no he tenido la suerte. De hecho por unos cuantos videos del Alive, se nota que la hacen muy bien. El tema es que para estos megaconciertos electronicos, mucho hacen los asistentes. Y en este caso los argentinos, como mencione en el comentario, lo sufren como un partido de futbol. Vale mucho.