Fantasmas hambrientos

Concierto de Wolf Parade. Sala Apolo / BCN diciembre 2005


19:45 Parece que se me (nos) pasó la mano. Somos los únicos giles (Eduardo y yo) a los que se les ocurrió llegar a la Sala Apolo casi 2 horas antes de la hora del concierto. Con toda la expectativa del álbum debut de esta banda canadiense, mas la grata sorpresa de un concierto a poco de la edición del CD en España, además del hecho que solo habría venta de entradas el mismo día y, para cerrar la cosa, pase libre para los que aún tuviesen en sus manos los abonos de la última edición del Primavera Sound, cualquiera pensaría que la cosa se pondría tumultuosa desde temprano. Pero no. Yo creo que tiene que ver con la tibieza con la que la gente recibe aquí acontecimientos similares. O con que yo vengo de un sitio donde algo así nunca ocurre.

De todas formas, de a poquitos, el recinto terminó llenándose, entre seguidores entusiastas, comparsas de los mismos, curiosos y algunos que parece que solo fueron por el mero hecho de tener la entrada libre. Cuestión de puntos de vista, pero me parece que si a mi me dan un pase gratis para ver a, digamos, Devendra Banhart (por mencionar a algún artista que me disguste), no voy. As simple as that.

El caso es que no fueron 2 horas las de espera, si no casi 4. Habrá sido culpa de la banda o de quién sabe qué, pero el tema es que demoró una eternidad la apertura de puertas. Y a eso habría que sumarle la otra larga espera para que la bulla al fin comenzase. Al frente salió un Dante Decaro, ex Hot Hot Heat, guitarra y armónica en mano, a tocar temas propios muy a lo Dylan. Un poco de confusión al principio, ya que 2 de los integrantes de Wolf Parade, Arlen Thompson y Hadji Bakara, salieron junto al susodicho haciéndole el respectivo acompañamiento. Luego se comprobaría que el tal Decaro ahora es el quinto integrante de la banda. Al margen de las similitudes (como ya dijimos) a Bob Dylan, lo de Decaro tampoco anduvo tan mal. Aunque, claro, las demoras, mas el ruido del respetable, no permitieron una escucha mas atenta.

En fin, un rato después salieron (¡al fin!) los famosos lobos a comerse el escenario. Y digo comerse porque le metieron harto punche y velocidad a casi todos los temas que nos ofrecieron aquella noche. Ahí salió al frente Dan Boeckner, con un look (¿pose?) a lo Iggy Pop y arrancaron inmejorablemente con 2 de mis favoritas del disco, It’s a curse y Dear sons and daughters of hungry ghosts. Con esta última canción descubrí (¿será que me estoy volviendo desorejado con los años?) que los vocalistas eran 2, al empinarme y ver en una esquina, en los teclados y como dedicándole la canción al suelo, a Spencer Krug, quien además parece ser el fundador del grupo. Entonces, tal como ocurre en el álbum, ambos vocalistas se repartieron los temas, donde además hubo lugar para un par de nuevas canciones y otra del EP de promoción. Se pudo notar ausencia total de bajo cubierta por (según teoría de Eduardo, mas entendido en el tema) los retumbes del bombo del batería Thompson. Decaro en otro costado con la segunda y algún que otro coro tímido y, completando el cuadro, Bakara con el theremin y la caja de efectos (o como se llame eso), que levantaba por sobre la cabeza de vez en cuando, cual éxtasis musical. La rapidez que metieron a todo el set dio mucha fuerza a un insuperable empalme de You are a runner and I am my father’s son con Fancy claps ¡Me cuesta entender cómo no se armó un pogo ahí! Una vez mas, la tibieza ya mencionada... Pero la misma rapidez quito brillo a otros temas como Shine a light o Dinner bells. Al final, poquito mas de una hora de concierto que, con pequeño bis en donde soltaron Modern world y I believe in anything, y a pesar de lo breve, dejó un muy buen sabor de boca.

Cuestión de finanzas

L’ENFANT / Dir. Jean Pierre Dardenne y Luc Dardenne - Bélgica (2005)


Demoré un poco en caer en la cuenta que está película pertenecía a los mismos creadores de Rosetta (1999), proyectada en algún minifestival europeo en Lima hace unos años. Ya esta obra, igual de premiada que la que nos ocupa (Palma de Oro en Cannes), nos mostraba la vida de una adolescente en los extraradios de alguna ciudad belga, siguiendo un tono realista (naturalista dicen unos) y casi documental y un estilo de filmación semejante a las que utiliza Lars Von Trier y su DOGMA (cámara en mano, sin música de fondo, etc etc). A Rosetta le siguió Le fill, y luego esta, L’enfant. Según los propios directores, la fijación de ellos en estos personajes marginados del supuesto Primer Mundo, esta determinada por el afecto que siente hacia los mismos, tratando de dar una mirada real a personas que en otras circunstancias pasarían desapercibidas.

La historia es bastante simple. Los personajes son una pareja de jóvenes de escasa edad en una barrio periférico belga. El, Bruno (Jérémie Renier), vive cometiendo robos menores (menores por lo que roba y también por la edad promedio de sus cómplices) y ella, Sonia (Déborah Francois) subsiste gracias a los beneficios sociales que le otorga el Estado. La llegada de un niño supondrá un cambio en la vida que llevan y la cuestión estará en como ambos se enfrentan a este acontecimiento, así como en los sentimientos antagónicos que Jimmy (el crío) producirá en los mismos. De manera casi frenética nos metemos en la precariedad de vida y los avatares de estos personajes (y mas en especial en la de Bruno) en el transcurso de dos o tres días. Y si suelto algo mas ya te estaré contando toda la película, que no es la idea.

Para terminar, cabe resaltar la actuación como otro punto alto en el film. A pesar de no contar con actores profesionales, el resultado es muy superior a lo logrado por cineastas latinoamericanos que siguen la pauta, como el argentino Carlos Sorín (“Historias mínimas”) o el mexicano Carlos Reygadas (“Batalla en el cielo”).

El baile en el llano

ANIMAL COLLECTIVE - Feels (2005) / Fat Cat


A estos no se les puede clasificar. Un amigo mío, vecino de mesa y compañero de automatismo laboral, estuvo probando términos, como para matar el rato: “neo-psicodelia”, “desconstructivismo musical”, “vanguardia circense” (este es el que me gusta más). Y es que la banda conformada por personajes como Panda Bear, Avey Tar (primero), Geologist y Deaken (después) hace tiempo que hace música muy, pero muy rara. No mucho tiempo atrás había cometido el error de juzgarlos tras solo oír los samples de su album anterior, “Sung Tongs”, experimento mas acústico y ligado al folk y la psicodelia.

Sin embargo, una escucha accidental por la radio de la primera canción promocional de “Feels”, “Banshee beat”, me hizo caer rendido. Donde sus mas de 8 minutos se pasan como si nada, entre las maravillosas fluctuaciones melódico-instrumentales (si cabe el término), que me hacían recordar a cosas hechas por múm o incluso Sigur Rós. Al datearme por ahí que Kristín Anna Valtysdottir (múm) habría metido mano en los teclados de algunas canciones, empecé a atar cabos. “Loch Raven” confirmó mis sospechas, siguiendo aún mas claramente esa pauta, optando por una instrumentalización aún mayor y todo este juego de capa sobre capa. Con estas 2 gemas me animé a hacerme del álbum. Y he de admitir que en un principio me impactó en el mal sentido, ya que el resto del mismo sigue coordenadas diferentes a las canciones mencionadas. Pero justamente esta variedad, con elemento marciano-experimental, es la que hace que con cada escucha uno los vaya queriendo más a estos animales. Y temas tan potentes como “Did you see the words”, “Grass” o “The purple bottle”, terminan por confirmar este como uno de los mejores lanzamientos de este año. Por momentos no puedo evitar relacionarlos a la etapa experimental de Pink Floyd, y, mas en especial, a esa rareza de alegato llamado “Several species of small fury animals gathered together in a cave and grooving with a pict”. De todas formas, creo que estos neoyorquinos están en otra galaxia, con sus drones, voces infantiles y coritos animalescos.

Delirio en New York

CBGB/ New York, Setiembre de 2005

Una noche fría, a media cuadra de Bowery y el invierno del 77 ya no daba ni para Country, Blue Grass ni Blues, solo unos punks de cuando la palabra no tenia connotación musical, fastidiando por un lugar donde tocar. Richard Hell y Tom Verlaine, los ex-Neon Boys (des)entonando Blank Generation y hablando con Hilly Kristal para tocar en domingos que no traen nada, y el resto es leyenda.
Entonces son Television, tocan la siguiente semana con The Ramones y mas tarde una rubia y su banda, Debbie Harris. Ahora no son solo vagos, ahora van college kids, pronto se juntan cuatro y son los Talking Heads, y bueno, This Ain't No Disco.
El CBGB podría cerrar, en estos dias funcionan aun cuando se les vencio el alquiler. Tenía los mas infames años de adolescencia cuando supe de su existencia, pero aquel cielo neoyorquino habia sentenciado mi llegada para este ultimo setiembre. Yo estaba parado en la entrada y pensaba lo que habria sido aquel invierno del '77, cuando esos muchachos llegaban al crepúsculo de su Marquee Moon, o cuantas Judies fueron punks, cuanta energía explotó en ese pedazo de Bowery. Hasta el mayor de NY, Michael R. Bloomberg se ha pronunciado al respecto, pero el CBGB , como no podría ser de otra manera, no le teme al No Future.
Oh I don't know why, perhaps they'll die.

Quit your common life

THE ROBOCOP KRAUS - They think they are the Robocop Kraus (2005) / Epitaph


Eléctricos. Esto es lo primero que se me viene al oír a estos alemanes, haciendo esta especie de postpunk electrobailable. Si, ya sé que hay muchas bandas en la actualidad que apelan a estos sonidos. Aquí se podrían apreciar las mas claras influencias en (nuevamente) los Talking Heads (hay que ver nomás la carátula) y en Colin Newman. Y respecto a bandas actuales, podrían sonar a veces a Radio 4 (sin las congas), o a unos !!! menos electrónicos (sin las trompetas) o, incluso, a Franz Ferdinand después de un shock eléctrico (y sin la pose fashion).

Pero estos originales de Nüremberg no son novatos en esto, este ya es su cuarto largo, luego de un largo recorrido musical dentro de tierras germanas, y unos comienzos hardcorianos bastante tiempo atrás. Y por los resultados del mismo se puede intuir éxito fuera de sus fronteras. El disco en cuestión casi no da respiro entre sus 12 temas, que hablan de la existencia humana, con sus diversas y pequeñas penas y glorias. Puntos altos en After laughter comes tears (nunca mejor dicho), I picture you, You don´t have to shout.... bueno es que están casi todas muy parejas y cuesta dejar un tema de lado. Pero igual me quedo con el cierre genial de There are better lights in Hollywood.

Dicen que en vivo son aún mas explosivos. Lástima que me los pierda por culpa de la programación de un partido de korfbal el día siguiente ("dormingo") a las 9 de la madrugada.

http://www.therobocopkraus.de/

Lo único que cuenta es el presente...

BROKEN FLOWERS/ Dir: Jim Jarmusch (EEUU 2005)


Casi podríamos decir que existe un cine marca Jim Jarmusch. A este cineasta primero lo descubrí de oídas, como icono del cine independiente estadounidense de los 90, antes de al fin poder ver alguna de sus comentadas películas. Parte de la culpa, se deduce, fue la nula exhibición o distribución de tal material en la Lima que dejé atrás. Me parece que fue en una de estas mini muestras, con proyecciones de DVDs, que organizaba Ricardo Bedoya (¿Las sigue haciendo?) que pude ver la primera obra de este director, Stranger than paradise, y quedé cautivado. Las películas del mismo que luego pude ver, entre proyecciones en salas y alquileres de DVDs, fueron Mistery train, Ghost dog, Cofee & cigarettes, Night on earth y Dead man, todas con un registro similar, con mucho de humor negro y unos personajes anodinos, con, aparentemente ningún atractivo y sumergidos en vidas rutinarias y aburridas, por un lado, y por otro con una fijación en los marginados y las mezclas de los tópicos raciales (En Ghost dog se puede ver a Forrest Withaker de samurai y en Dead man a Jhonny Depp convertido en piel roja).

Dicho esto, no habría alguien mejor que Bill Murray para encarar un personaje principal jarmuschiano: parco, pusilánime y melancólico. En esta película Murray tampoco se aleja mucho de la gran interpretación que nos dejó en Lost in translation, mostrándonos a un personaje que abrazó éxito en el pasado y que ahora, al parecer, ya no le quedan mayores motivaciones, y se deja llevar por los acontecimientos sin oponer resistencia. Aquí interpreta a Don Johnston, un mujeriego entrado en años, quien ve rota su rutina al recibir la noticia de que de una de sus tantas relaciones le salió un hijo hace 19 años. Es ante esta posibilidad que Don se lanza (no sin ayuda) a la búsqueda de la supuesta madre. Y así se cruza con mujeres como Sharon Stone, Jessica Lange o Tilda Swinton, además de las muchas tentaciones que se le cruzan en su camino para hallar las respuestas que tal vez le den nuevos bríos a su solitaria vida. El desenlace es lo de menos en esta pieza exquisita en donde Jarmusch se regodea hasta la toma de un simple plato de comida.

http://brokenflowersmovie.com/

We don't make peace

Concierto de The Wedding Present. Sala Apolo / BCN octubre 2005


Me los perdí en el Primavera Sound, así que esta fue la del desquite. No mucho, eso sí, el público en esta oportunidad en la Sala Apolo. Curioso ver pegados anuncios en donde la banda solicitaba a los concurrentes no fumar cerca del escenario, a lo que no muchos hicieron caso. Otra curiosidad fue ver al mismísimo David Gedge en el kiosko de merchandising (¿querían vender mas polos o qué?) firmando autógrafos (por ahí me queda mi entrada como prueba). La bulla arranca antes de lo esperado para beneplácito de servidor (¿Será el horario británico?). Y digo bulla porque Gedge y compañía dieron rienda suelta a su repertorio mas rápido y ruidoso, con esos rasgueos de guitarra tan fáciles de identificar en las canciones de sus primeros discos, y reduciendo a solo 4 los temas tocados de su última producción, "Take Fountain". La banda funcionó a la perfección, sobresaliendo los coros de Terry De Castro y la batería de Kari Paavola, teniendo a un Gedge que por momentos hacía recordar al mismo Morrissey (con amaneramientos y todo) en algunas de sus interpretaciones.

Lo malo, alguna que otra canción de Cinerama (banda que tomó el relevo de los weddoes sin muchos bríos), y lo poco que duró (algo más de una hora). Hubo también varias intervenciones del frontman, tratando de establecer diálogos con el respetable, echándole la culpa a la bajista (De Castro) por los carteles de "No smoking", agradeciendo la acogida que siempre tienen en "Spain" (a lo que la platea aclaraba: "¡Catalunya!"), mejor al aceptable recibiento que tienen en Francia y al poco entusiasmo en Reino Unido. Recuerdo también la pregunta "What's typical in Barcelona?" a lo que un avispado respondió "¡L'Estatut!". Dudo que el mencionado haya entendido el chiste.

Me quedo con las estupendas interpretaciones de "Always the quiet one", "I'm from further North than you", "Ringway to Seatac", "A million miles", "Blue eyes", "Corduroy", "Lovenest"y, para cerrar, los últimos comentarios de Gedge: "By the way, we never do recalls... How do you say recall in Spanish?" "¡Bis!" dijeron por ahí "What? Peace? No, we don't do peace, we make war... It's a joke of course" ¿Políticamente incorrecto?

http://www.scopitones.co.uk/

It’s not Global, but Underground! / Quiten ese disco de Cafe del Mar! respeten el cumpleaños

Como en el video de Aphex Twin “Come to daddy” donde los devotos protegen a la TV y el contenido (representado por la criatura que nace desde sus entrañas), así me parece en general la escena dance peruana (o mejor dicho limeña), donde unos pocos oportunistas mediáticos (a los cuales les falta espíritu transgresor e informativo) son adorados por unos seguidores los cuales tampoco quieren salir de aquellos ritmos que hipnotizantes y trepidantes los cuales no han evolucionado en mas de 10 años, inclusive para muchos ese tan manoseado “progressive house” es igual al también vapuleado “trance”!; sin hablar de ese segmento “adulto contemporáneo” que cree distinguirse del mainstream con la ingesta a cantidades de ese molusco baleárico y fashion, apunto de podrirse, mal llamado “chill out” (los KLF se deben dar de golpes en la pared de que descartables como Café del Mar sean puestos en el mismo saco de su obra maestra).

Si bien, se pueden encontrar algunos lugares donde conseguir algo de buena electrónica, no necesariamente se puede encontrar buen dance, y lo mas penoso es que la mejor fuente sigue siendo la búsqueda autodidáctica a través de la web y el Soulseek. Si bien en las noches limeñas pasan cada vez mas seguido algunos “legendarios renacentistas” como Howells, Kleinenberg, Van Dyk o Cattaneo (de la elite mainstream dance) o Dj’s sin mayor fuste que son vendidos como dioses (Tatana y Creamer por ejemplo); también se van mostrando tímidamente (aun como segundones en el cartel) verdaderos innovadores de la electrónica, como por ejemplo Josh Wink (estamos en revival del “acid” noventero no?) o el gran Michel de Hey (quien viene en tres semanas) quien creo la escena “hard techno” en Rótterdam.

Esto lo estoy escribiendo, porque supuestamente estamos celebrando este año el cumpleaños numero 20 de la escena electrónica dance…..esta bien, estamos de acuerdo! eso no es cierto!……….donde dejamos el “synth pop” de Depeche Mode o New Order, el disco de Donna Summer o Giorgio Mororder, el “mutant” de Arthur Russell o la frialdad maquinal de Kraftwerk; pero se supone que el nacimiento del “house” hace 20 años (1985) fue el punto de inflexión para todo lo que vino después.

Entonces para complementar este escrito (queja¿?), en próximos artículos voy a mencionar algunos movimientos electrónicos, que me parecen muy interesantes para ser explorados…….reseteemos el K-Set, juguemos Atari…It’s not global, but Underground….

Dentro del smog

BAM / BCN septiembre 2005


Algunos de ustedes ya se la saben. En esta ciudad hay un momento en que las fiestas vecinales se suceden una tras otra. Aunque en realidad corresponden a aniversarios de cada ciudad, ciudades que con el pasar del tiempo se fusionaron en lo que ahora es Barcelona. Es así como están las fiestas de Gràcia, seguidas de las de Sants, y seguidas por las de Barcelona misma. Los que me conocen ya sabrán que yo no soy muy partidario de este tipo de manifestaciones. Una semana de borracheras, broncas callejeras, petardos y demás hierbas no es algo que, por decirlo de alguna forma, me motive en especial. Pero si hay que salvar una, esta es La Mercè. No porque sea muy diferente de las demás, si no, mas bien, porque en esa semana se desarrolla el BAM, Barcelona Acció Musical, con motivo del cual se dejan caer banditas para todos los gustos, desde las dirigidas al gran público, hasta otras menos conocidas, casi siempre en actuaciones al aire libre y sin costo alguno para el respetable. Esta vez dicen que se recuperó la tradición de antaño, ya que el año pasado se optó por dar preferencias a bandas locales (eso dicen, yo mas bien diría que hubo ajuste de presupuestos), y, salvo contadas excepciones, la verdad es que no es que haya mucho que rescatar en la movida indie catalana. Eso sí, salvaron el festival Café Tacuba.

Pero eso fue el año pasado (¡Qué rápido pasa el tiempo!). Esta vez se recuperó el formato y, dentro de lo presentado, visitaron The Raveonettes, Tahiti 80, Caribou, Donna Regina, Sebastian Schuller, (Smog), entre otros (hubo también harto world music, fusión y hip-hop pal que le guste). A excepción de los 2 primeros, servidor pudo observar las performances de los mencionados, de las cuales cabe reseñar la de Bill Callahan, aka (Smog), considerado junto a Howe Gelb uno de los pioneros del llamado country alternativo. Con un formato peculiar, guitarra acústica en mano, casi a la altura del mentón (oí a algunos gringos comentando que esa era el German style... ¿?), y solo acompañado por batería (aunque mas parecía percusión) y piano de cola. Dio preferencia a su última producción, A river ain’t so much to cross, así como a sus temas mas taciturnos, siempre potenciados con esa grave voz tan característica. He de admitir que se creó todo un clímax a su alrededor, con un público en su mayor parte atento, y con la materialización del otro smog en el ambiente, esos humos invasores expulsados por la amplia platea fumadora (¡Ya quiero ver yo como entra en vigor la ley antitabaco del año que viene!). Es que, supongo yo, será la música que mas se presta para tal ejercicio. En fin, el tema es que (Smog) cerró la performance de forma brillante, subiendo un poco los ánimos, con 2 de sus “hits”, si es que cabe llamarlos así. Primero con I was a stranger y luego con Bathysphere. Con cuerda rota y todo fue suficiente. Luego vino Ben Lee y su insulsa música veraniega, el mismo que anunciaba que no podía creer que le había teloneado nada menos que a (Smog). Así es. Yo tampoco lo podía creer.

Documento porno

INSIDE DEEP THROAT / Dir. Fenton Bailey y Randy Barbato - EE.UU. (2005)

Este (pasado) mes cabe resaltar 2 documentales: Spellbound, realizado por Jeff Blitz y donde se retrata (una vez más) los límites de la alta competividad en la sociedad gringa. Esto visto a través de una famosa competencia anual de deletreo entre niños menores de 15 años. Como diría una protagonista "Another way of child abuse". El otro documental es el que nos ocupa, mostrándonos otro aspecto de la misma sociedad. Garganta Profunda es aquella película porno de la cual se oyó mucho a inicios de los años 70. La producción muestra todas las vicisitudes por las que pasaron los implicados en tal proyecto. Antes y sobre todo después del éxito rotundo del mismo (¡Una inversión de apenas 25 mil dólares que recaudó mas de 600 millones!), y que marca un antes y un después en el cine porno, mostrándose por vez primera las dotes de una mujer en la aplicaión del fellatio. Es casi patético ver el final de los 3 principales involucrados, el director, Gerard Damiano y, en especial, los actores principales, Linda Lovelace y Harry Reems (el de la foto) al ser víctimas de la persecución y censura del gobierno de Nixon. De la misma forma que lo es el ver la vigencia de estos hechos, en estas divergencias de la actual USA, libertad de expresión por un lado y por otro la censura por motivos morales. La dirección de Fenton Bailey y Randy Barbato nos muestran los hechos con entrevistas de diversas personalidades, de uno y otro lado del espectro (defensores contra censores). Un mas que interesante documento.

http://www.insidedeepthroatmovie.com/

Motel Mozaique Festival (Rotterdam / Abril 2005): Dejando la niebla del puerto (parte 2)

El plato fuerte, que veníamos persiguiendo por meses (que fría era la noche en Utrecht cuando nos quedamos sin boletos para ver a 2 Many Dj’s, LCD y a Chicks on Speed casi un año atras!), estaba en la segunda parte de la noche. A partir de las doce la contemplación y el gozo autista pasaban a una desenfrenada ganas de mover los pies y embriagarse en alcohol, sino en otras sustancias, con LCD Soundsystem, 2 Many DJ’s y Tiga.

Para ello nos movimos de escenario, y por suerte pudimos entrar!, con el club Nightonwn lleno al máximo (fácil defensa civil en Lima hubiese clausurado el concierto) salio al escenario James Murphy y su combo, mandando a trallazos hit tras hit (que velocidad en “Tribulations”, “Daft Punk is playing in my house”), diciéndonos con la fuerza de las percusiones (ese “Beat Connection” inicial), las letras testimoniales (“Losing my edge”) y los descansos entre canción y canción, que su propuesta se basa en lo humano, mas no en la electrónica; confirmándonos que LCD Soundsystem no es solo una suerte hype, sino que si tiene bases para seguir y mirar el futuro del punk, de la electrónica, del funk, o de lo que sea con ideas frescas; ese acid final en Yeah, simplemente me traslado por un momento a una época y lugar donde nunca viví.

Ya habían pasado casi 30 minutos desde que Murphy y Co. habían terminado destrozando (musicalmente hablando) el escenario y con aun las heridas en nuestros cuerpos brotando acid, comenzaron el set los hermanos Dewaele, y la sorpresa fue mayúscula cuando en vez de un inicio electro, nos saturaron los oídos con un loop de samples de guitarras de casi 5 minutos que se extendería hasta iniciar la verbena bootleg con “Robot rock” de Daft Punk, de hecho, la mezcla de estilos característico de estos belgas se pronuncio mas por el lado techno, donde detroit techno, house, disco y minimal se amalgamaron con gran indie rock y clásicos populares (siempre los Jackson 5 estarán presente). Al menos para mi, son los mejores DJ’s del mundo actualmente (aun no he escuchado en vivo a Kid Koala), justamente los 2 Many DJ’s tienen esa facilidad de realmente ver lo que el publico quiere, pero sin dar concesiones facilistas. Para que quieres más si puedes encontrar en una misma fiesta Blur, Michael Mayer, White Stripes, The Rapture, YAZ, Fingers INC, De La Soul, Reihanrt Voigt, entre otros. Para recordar, la entrada de “Song 2” (nunca vi tanta gente saltando) y que tal mezcla de “Yeah” de los LCD con Josh Wink. Adorados, tal como la gente los trataba en el escenario, incluso con mayor devoción que cualquier artista de rock, héroes.

El cansancio ya estaba no solo en mi cuerpo, sino en mi mente (solo bastaba recordar todo lo que tenia que caminar para regresar a casa! -45 minutos, pues no había para el taxi), así que dejamos el trabajo de Tiga, solo a pocos segundos de iniciado. Era una lastima, pero igualmente no podíamos seguir, ya eran las 4 a.m., y como en todo festival, siempre pierdes algo, en mi caso fueron Anthony and the Johnston, el mencionado set de Tiga y a esa promesa (fácil es mas realidad que Bright Eyes) Patrick Wolf.

Ese es el Rótterdam que yo ahora recuerdo, el de esta fiesta interminable, como ciudad importante no solo comercial, sino también musical, es lo que aun me hace pensar con cierta tristeza en mi pasado reciente y las cosas que aun seguiría disfrutando. Solo perdónenme por las malas fotos (tengo que cambiar mi cámara o mejorar mi técnica) y por no tener un póster autografiado de Murphy, pues me lo encontré comiendo un Kebap en un puesto en la calle cuando salí del local y no me atreví a pedirle un autógrafo. Eso también es parte de la memoria imborrable.

Por si van a Rótterdam por cada Abril, siempre encontraran este festival: http://www.motelmozaique.nl/

Motel Mozaique Festival (Rotterdam / Abril 2005): Dejando la niebla del puerto (parte 1)

Probablemente las despedidas son los momentos mas difíciles para una persona, no solo porque significa un cambio en tu vida, sino, y creo lo mas importante, porque te deja de forma imperecedera un recuerdo quizá imborrable. Aunque Rótterdam me abrió las puertas a la vida europea, de repente por lo que viví por casi dos años con presupuesto de estudiante, no me dejaba mucho como ciudad, fuera de su arquitectura moderna (y que tal NAI!), la gente amable, poco sitios para disfrutar de buen rock o electro (mira a Ámsterdam o a Utrecht!, aunque no me quejo de los conciertos en Nightown o Rotown). La sensación de alejamiento se iba a transformar más en una ruptura de costumbre.

Con los tickets para regresar al otro lado del charco en mano, me entere fortuitamente de un festival de música que se realizaba todos los años (que despistado que iba!) y de hecho no dude un segundo en posponer una semana mas mi estadía en el gran puerto europeo. El cartel de este Motel Mozaique Festival no era comparable con el de algunos otros festivales en Holanda como el Pinkpop, ni menos con otros en UK o en España, pero el debut europeo de Herbert con su Plat du Jour, LCD Soundsystem, 2 Many DJ’s, Lemon Jelly, Doves, Patrick Wolf entre otros, para nada es material despreciable.

Ante la falta de fondos (nuevamente me ponía cabe!), solo pudimos comprar las entradas para la fecha del viernes (y de hecho la mejor). La noche se veía prometedora y bastante agotadora, más aun si nuestra hoja de ruta se cumplía a cabalidad. Comenzamos con un Herbert espectacular con su Plat du Jour donde nos convenció que es uno de los genios de la electrónica, su “orgánico” desempeño en base a sampleos de elementos de cocina e ingredientes animales y vegetales, nos dio una excelente conjunción de respuestas sonoras (beats y melodías absolutamente abstractas y a la vez pop!), visuales (aquellas secuenciadas “recetas” de cocina te hipnotizaban) y de olores (con una cocinera realizando platos cuyos aromas iban rodeando el auditorio). Al final del acto puso además toda su sabida ideología comunista en un video (bajo un mantra sonoro acorde) anti capitalista y anti facista con el que enmudeció al auditorio entero (estabamos rendidos!). Simplemente consolidó una puesta en vivo normalmente muy difícil de trasladar del estudio al escenario por la mayoría de los artistas electrónicos.

Acto seguido, los Lemon Jelly llenaron el auditorio, endulzaron a su publico con su conocido pop electrónico que revisa un vasto abanico de influencias, desde rock, folk hasta breakbeat y principalmente downtempo. Lamentablemente, justo en la presentación de su buen single para este año, “Make things right”, el equipo falló y la música y el video se fueron por varios minutos, que aun luego de continuar nos bajó las pilas.

Así se iba terminando la primera parte de la noche, y ahora teníamos que decidir que artistas seguir.

Con o sin Darwin

BROADCAST - Tender buttons (2005) / Warp


Estuve esperando con ansias el mes de septiembre, ya que algunas de mis bandas favoritas amenazaban con nuevo material, por lo que supuse que tendría difícil el mantener el formato de 1 mes = 1 disco. Fue así que llegaron a mis manos las últimas producciones de Sigur Rós, CocoRosie, Ladytron, Mice Parade, Death Cab for Cutie (comentado líneas abajo) y esperados debuts como Editors y Khonnor. Luego de varias escuchas de los mencionados, con mejor suerte unos que otros, terminé mas satisfecho con lo último de esta cada vez mas reducida agrupación de Bristol, ahora transformada en dúo.

Sin salirse de las coordenadas de su anterior disco (Haha Sound, Warp 2003) y de los grandes resultados sonoros del mismo (para gusto de servidor, puliendo mas lo logrado con su debut, The noise made by people), la voz de Trish Keenan, los teclados y sus efectos marcianos y una línea de bajo clara siguen dando la pauta en el sonido característico de Broadcast, entre melodías marca de la casa que, sin embargo, no dejan de tener relación con lo hecho por bandas mas recorridas como Stereolab y Pram. Se podría decir que aquí las exploraciones les lleva a ahondar mas en nuevas frecuencias auditivas. Si en el Haha Sound me quedaba al final con Hawk, aquí, puestos a escoger, Corporeal es tal vez el tema que mejor engloba el sonido del album. Esto, sin obviar otros tantos puntos altos como I found the F, America's boy, Arc of a journey o Goodbye girls.

Como la propia Keenan dice: La visión de la banda esta en el potencial del folk, la canción de cuna y la electrónica para provocar memoria e imaginación. El pasado establecido en el futuro. Una lírica retrospectiva dispuesta en una descripción electrónica de un mundo orgánico.

http://www.broadcast.uk.net/

Nos equivocamos, quizás era el momento errado….Death Cab For Cutie / Plans (2005)

Viernes por la noche, salíamos del departamento luego de una charla entre tragos y humo, simplemente pasándolo bien entre amigos. Nada especial, solo tratábamos de alargar la agonía física con la ingesta de alcohol y el perdernos en la multitud de un bar y en el anonimato de la noche; pero antes de ello teníamos que sortear un gran obstáculo: el interminable camino entre La Molina y Barranco. Entonces la elección debería de ser acertada: apenas subimos al auto determinamos que el “Plans”, nuevo album de Death Cab for Cutie iba a ser el salvoconducto. No nos pusimos a pensar si este nuevo álbum de la banda de Ben Gibbard iba a consolidar el estilo esbozado en el gran “Transatlaticism” (Bersuk – 2003) o iba a estar infectado de la influencia electrónica de Jimmy Tamborello como en “Give Up” (2003 – Sub Pop) de The Postal Service; solo queríamos emocionarnos, como lo habíamos hecho antes con esta banda, para llegar pilas a nuestro destino.

Aun cuando ya sonaba “Marching Bands of Manhattan”, no la pudimos distinguir, se colaba solo como un susurro dentro del vacío, pues seguíamos confundidos entre el sonido del motor y nuestra discusión; pero al avanzar en la ruta, también nos animaron los rasgueos de esa guitarra tan “indie rock” que caracteriza a la banda; pero ya no suenan a ellos mismos: están mas pulidos, los arreglos son mas limpios, inclusive “Soul meets body” nos recuerda en cierta manera a Fleetwood Mac; “Summer Skin” nos remite a unos Red House Painters sin tanta culpa y remordimiento interior. Veinte minutos después nos llega el sobresalto, la guitarra con delay tan indie de “Your heart is an empty room” nos emociona, nuestra mente deja de tener contacto con las sensaciones reales, la avenida se torna tan clara, que confundimos el reflejo de la luz artificial con un amanecer irreal. Aun perplejos por el impacto anterior, dejamos pasar esas insinuaciones de distorsión independiente que son “Someday you will be loved” y “Crooked Teeth”. Suenan tan promedio, tan absolutamente controladas.

Finalizando el disco las baladas se apoderan nuevamente del álbum, coincidiendo con la llegada al punto final de nuestro viaje con el ánimo entre apagado y disgustado; por que nos equivocamos, quizás no era el momento!. Probablemente era un disco para un fin de semana en ruta soleada, para no ponerle tanta atención y dejarlo pasar en el ambiente, mirando siluetas definidas y reales. No era la banda que conocía, de repente con más escuchas cambio de opinión, pero luego de leer la caja, me di cuenta que primero debí de ver que habían dejado Barsuk por Atlantic. Entonces me pregunto nuevamente: Nos equivocamos?.

Años de dogma

BUONGIORNO, NOTTE / Dir. Marco Bellocchio - Italia (2003)


Cuando se habla de secuestros, suele ser común ponerse en el papel de la víctima, del secuestrado. Se tiende a pensar en los perpetradores de tales hechos como en monstruos abominables, en seres inhumanos y carentes de sentimientos. En esta película del veterano director Marco Bellocchio (estrenada tardíamente en España) se opta por una visión diferente, tomando como base hechos reales. Las Brigadas Rojas, autores del secuestro del que fuera Primer Ministro italiano Aldo Moro, a fines de los 70, se ven representadas por un grupo de jóvenes atrapados por las circunstancias y con poca conciencia de la magnitud de sus actos. Grupo que sigue al pie de la letra los dictámenes de sus incuestionables ideales, así como las órdenes de sus invisibles líderes. Esto se hace mas evidente en el personaje femenino, encarnado de manera brillante por Maya Sansa (a quien también tuve la oportunidad de ver en La Balia, del mismo director). No pude evitar relacionar este personaje con lo que alguna vez leí acerca de la importante participación de mujeres tanto en Sendero Luminoso como en el M.R.T.A., en donde muchas veces eran encargadas de las ejecuciones y demás acciones sangrientas. No es así en este caso. Bellocchio utiliza el personaje de Chiara para establecer la relación entre los captores y Moro, y a la vez mostrar la lucha entre sus convicciones ideológicas y las humanas , con todas sus contradicciones, sin que se tome partido por los autores del secuestro. No dudo en recomendar esta película, más aún en un momento como el actual. Esperemos que no demore mucho en llegar al otro lado del charco.

Every story has two sides
Every coin two faces
I feel for the one who hides
And for the one who chases

(Ron Sexsmith)

¡Hagamos el Zarathustra!

CLAP YOUR HANDS SAY YEAH - (sin título) (2005) / Clap your hands say yeah


Se aventuraba un verano sofocante por estos pagos, sobre todo debido a unas temperaturas inusualmente altas al final de la primavera, cosa que al final no ocurrió. Y junto con este verano a media caña llegó a mis manos esta joyita. No cabe duda que la irrupción de Arcade Fire el año anterior ha abierto las puertas a diversas bandas pequeñas que entrarían dentro del llamado avant pop, deudores, entre otros, de grandes como David Bowie y Talking Heads (esperamos también con muchas ansias el album debut de Wolf Parade). Y esta banda de Brooklyn son una muestra de aquello.
Desde el comienzo casi circense con Clap your hands! (que tal vez podría orientar a un desarrollo diferente del resto de la producción) a primera escucha se puede notar la influencia de David Byrne en la interpretación vocal de Alec Ounsworth. Los temas posteriores se alejan un tanto de ese despegue introductorio, dando mas fuerza a las guitarras y llegando a cúspides hacia la segunda mitad, donde se dejan oir The skin of my yellow country teeth (que hace recordar por momentos al mejor Modest Mouse), Is this love? (esos tecladitos a lo Grandaddy) y Heavy metal, bajando un poco la intensidad en los temas siguientes, donde por ahí dicen oír influencias de Neutral Milk Hotel (no tan claras para este servidor). Como leería en una reseña, es como si Arcade Fire decidiesen ser menos lúgubres y trágicos, optando por ser un poco más optimistas y festivos (que tampoco hace daño... y miren quien lo dice).
Para terminar, el hecho de autoproducirse y autodistribuirse, nos hace creer nuevamente que se puede ser indie hoy en día aún en esos campos. Nota aparte el hecho que falte mucho para que se distribuya en España (como ocurrió con los de Montreal suficientemente mencionados) y que el CD en cuestión me haya llegado desde...¡Lima! Y mas concretamente de ... ¡Las Galerías Brasil!
Escúchalos, escúchalos. Y tu también aplaudirás.

Late Night Tales

Es inherente a los seres humanos el buscar constantemente el porque de las cosas; y el arte tampoco puede considerarse un tema lejano a aquel concepto. Por ello, lo ideal para todo interesado en la música es acceder a un ensayo en el cual el artista describa y explique claramente de que trata su obra, la forma de composición, la técnica y sonido usado en estudio, la razón de sus letras y el concepto de la obra; utilizando desde argumentos simples hasta explicaciones psicológicas y filosóficas; es mas, para complementar el documento, se podrían citar el momento social, el grupo en el que se desenvolvía, la movida y sus influencias musicales. De esta manera, mediante ese preciso proceso inductivo, se evitan confusiones y malentendidos.

Pero al mismo tiempo, una obra de arte te remite indefectiblemente a múltiples sensaciones, y considero muy difícil el poder explicar y describir un álbum, una canción o un concierto mediante palabras. Personalmente creo imprescindible el poder recrear imágenes para el gozo absoluto de una pieza musical; y eso es lo que buscaré en estos artículos, quizá algo ambicioso, ya que es sumamente difícil para mi el poder adaptar sonidos y hacerlo tangibles en un alfabeto de blanco y negro mediante una narración que los pueda enganchar, pues no tengo ni medianamente la habilidad de un escritor.

Lo único que trataré en el futuro es compartir algunas apreciaciones y experiencias que he vivido en distintos lugares y en diferentes momentos a través de simples historias, y tómenlo como eso, simplemente narraciones para leerlos en la noche.

Primavera paracaidista

Primavera Sound 2005. Forum / BCN mayo 2005

Heme aquí, reportando esta segunda experiencia en este festival que cada año crece y se pone mejor. Como alguno de ustedes recordará, el año anterior tuve que conformarme con ver los conciertos principales desde afuera, subido en una banca y pudiendo distinguir, a lo lejos, a gente de la talla de Franz Ferdinand, Primal Scream, P.J. Harvey, Wilco o Pixies. Pues bien, este año mis posibilidades económicas mejoraron un tanto y alcancé a pagarme... el primer día del citado festival (el mas barato, que no el menor en calidad de cartel). Esta vez se utilizaron por primera vez las instalaciones del famoso Forum.

Jueves 26 mayo

Fecha de inicio del ajetreo, empezando la faena oyendo a uno de estos tantos cantautores locales a los que se les revienta mucho cohete, sin que uno sepa bien por qué. Xavier Baró estuvo para el bostezo. Siguieron unos empeñosos pero repetitivos Art Brut, que al menos consiguieron atraer un poco mas al respetable. Y de allí empezó lo bueno. Turno a Maxïmo Park, una de las sensaciones del momento, sin salirse demasiado por derroteros marcados por gente como los anteriormente citados Franz Ferdinand o Bloc Party, pero con un album debut que, a juicio de este servidor, logra mejores resultados que ambos (siendo la diferencia mucho mayor si la comparación es con mamarrachos como Futureheads, Kaiser Chiefs o The Bravery). La banda de Newcastle mezcla influencias de bandas punk emblemáticas como The Jam o The Stranglers, con ochenteras como The Smiths o los primeros XTC. Y en el directo lo demostraron todo, ante un público que en su mayoría los desconocía. Desde su salida Paul Smith (frontman del grupo) se comió el escenario, con sus gesticulaciones y bailes peculiares (por llamarlos de alguna forma), dando forma a temas como Apply some pleassure, Limassol, The coast is always changing, Once,a glimpse, Postcard of a painting, entre otros. Todo esto junto a la descarga de energía del resto de la banda, donde el tecladista Lukas Wooler marcaba también la pauta. Al término de ellos, venía el plato fuerte, la apuesta a seguro. La banda revelación del año pasado: The Arcade Fire. No hubo que esperar mucho para verlos, a ellos mismos, conectar sus diversos instrumentos y hacer las pruebas de sonido. Momento en que ya el espacio estaba casi colmado de gente. Y la gente se rindió a los canadienses, al menos desde donde yo estaba, muy cerca (tal vez demasiado) al escenario. No dejó de sorprenderme la cantidad de fans que esta banda atrajo. Tanto así que hasta se armaron pogos en los momentos más álgidos, como cuando se dejaron oir Neighborhood #1 (Tunnels) o Neighborhood #2 (Laika). Algún que otro problema de sonido no melló en un concierto para el recuerdo. Y si a uno se le queda la performance de Smith en la banda anterior, en esta me quedo con la de Régine Chassagne y su baile de robot en Haiti, o las baquetas de Tim Kingsbury, dándole a la estructura del escenario en Laika.

Luego vinieron Los Planetas, con un concierto demasiado local, pero dando gusto a sus muchísimos fans. Fue muy curioso ver el cambio de público cuando estos terminaron, la mayoría de los españoles abriendo paso a los otros colectivos fuertes en asistencia a este festival, franceses e ingleses. Siguió Radio 4 con un concierto bastante correcto, con momentos altos en temas como Party crashers, Absolute affirmation o Dance to the underground. El cansancio y el deber de madrugar al día siguiente por trabajo, me impidió ver la performance de un exponente del llamado electroclash, Vitalic.

Viernes 27 mayo

Para este día no había entrada. Y tocaba New Order. Junto a una compañera de trabajo nos planteamos la NECESIDAD de colarnos, o al menos hacer el intento. La deserción a última hora (por motivos de fuerza mayor) de Gracielita me dejó solo en la aventura. De alguna forma mi asistencia del jueves sirvió también para inspeccionar las posibilidades de esta colada. Luego de un primer intento fallido, terminé uniéndome a un grupo que de a pocos se fue haciendo mas grande (seguro fuimos alrededor de 12 en algún momento). Todos con el mismo objetivo. Rodeando el recinto, terminamos en el intercambio vial, por debajo de la plataforma donde todo ocurría, y así, casi de casualidad, nos topamos con el acceso vehicular a una de las edificaciones del Forum. Mayor fue nuestra sorpresa, al encontrar este ingreso tan obvio con la reja entreabierta. Tres chicas inglesas fueron las primeras avezadas en meterse corriendo a la edificación en cuestión. Del grupo espontáneo de usurpadores, solo nos animamos 5, sin saber, a ciencia cierta, a donde nos llevaría el meterse en esa obra aún sin terminar. Terminamos en un corredor larguísimo y oscuro, por el cual continuamos por unos 15 minutos hasta el final del mismo, donde habían algunas ventanas a través de las cuales se divisaba ya el interior del recinto, más no del festival. Las 3 chicas cometen el error de dar marcha atrás y buscar algún otro acceso, cuando a los pocos minutos doy de golpe con el hueco de la escalera (aún me queda la marca en la rodilla). Descenso y al final de la misma, puerta antipánico que finalmente nos saca del enorme edificio. A la salida del mismo, una rampa lateral externa parece ser nuestra ruta a la gloria, para superar, mientras se subía, los 8 metros de muro. De los 5 primero suben 2, luego otros 2, ante mi cautela que me invita a esperar a ver que pasa. Al pasar los minutos y no ver de vuelta a los compañeros de viaje, decido subir también. Final de la rampa y el muro se reduce a poco más de 2 metros, con la sorpresa ante la ausencia de gente de seguridad. Con la invaluable ayuda de otros desconocidos logré saltar el último escollo y estar finalmente donde minutos mas tarde tocaría la mítica banda de Manchester.

Incursión al margen, vino New Order, con un concierto mucho mas rockero de lo que uno podría esperar. Intercalaron canciones de su último trabajo (bastante flojito), con otros clásicos, con puntos cumbre, de conexión con el público que llenó el recinto (que no se volvería a llenar después), como Blue Monday, Regret o Bizarre love triangle. Incluso tocaron un par de Joy División, como para terminar de meterse al público en el bolsillo (a pesar de una no muy afortunada interpretación) Transmission y, sí, esa misma que están pensando. Al final de un concierto un tanto irregular, yo me quedo con canciones inesperadas como Love vigilantes o Temptation. La noche, igual, ya estaba saldada. Terminado New Order la masa se dispersa y yo opto por ver, sentado en tribuna, a Mercury Rev a la distancia. Sentimientos opuestos con New Order, Mercury Rev solo me interesa a través de su último disco, del cual echó muy poca mano en su performance, recurriendo mas bien a sus clásicos en tono bastante épico, para deleite de sus fans y aburrimiento de los demás. Según horario, tocaba saltarse a otro escenario, donde tocaba otra irrupción musical interesante de este año en curso. Tomen nota de Whitey y su album debut “The light at the end of the túnel is a train”, un rock con bases electrónicas, que recuerdan al Beck de sus primeras incursiones a veces y otras a NIN o a Prodigy (¡no al actual!). Pero el horario falló y solo alcancé a ver los 2 últimos temas de los liderados por Nathan J. Whitey, alcanzando sin embargo a disfrutar de Nonstop. Ese adelanto de horario me llevó a la fuerza a ver a Human League ¡Eso sí que fue teletransportarse a los 80! Nunca fui muy fan de los citados, pero no puedo negar que me divertí con esas canciones tan típicas de Bauhaus* o Nirvana* (en su época), con esas coreografías, vestimentas, instrumentos... ¡Hacía demasiado tiempo que no veía a alguien tocando uno de esos sintetizadores portátiles! En fin, buen cierre.

Sábado 18 mayo

Luego de 2 largas noches musicales, el cuerpo ya empezaba a sentir los estragos. Pero eso no fue suficiente para planear una segunda incursión (con el aliciente de ya conocer la ruta), esta vez con el apoyo de 3 compañeros del Master (2 belgas y un portugués), con el motivo principal de ver en vivo a Echo & The Bunnymen, nada menos que en el Auditori, dentro del famoso edificio azul de planta triangular de Herzog & De Meuron. Esta vez con la complicidad del responsable del bar situado en la esquina de nuestro último obstáculo (¡nos obsequió cerveza felicitándonos la hazaña!), llegamos justo a tiempo para ver a Ian MacCulloch y su banda en un espacio tan amplio y de tan buena acústica. Mi nostalgia ochentera se vio mas que gratificada al oír lo mejor de esta banda: The cutter, Rescue, Killing moon, Lips like sugar, Seven seas, The Promise, Back of love, Bring on the dancing horses y obviar temas mas recientes, poco afortunados en su mayoría (con la excepción de Nothing lasts forever). Cierto que la voz de MacCulloch ya no es la misma, algo que igual fue cubierto por un desempeño impecable de la banda. Incluso se dieron el lujo de meter extractos de 2 claros referentes del frontman en cuestión: Jim Morrison (Roadhouse blues) y Lou Reed (Take a walk on the wild side).

Del Auditori al escenario principal, donde tocaba el cabeza de cartel de la noche, Sonic Youth. He de reconocer (con riesgo a ser apedreado) que nunca fui muy fan de estos. Y que la extensión de muchos de sus temas en vivo y el exceso de feedbacks (marca registrada, ya sé) me llegaron a cansar en un momento. Por ahí se dejaron escuchar temas clásicos como Teenage riot y otros tantos de sus albumes recientes. Terminan los bostonianos y salimos rumbo a la misma carpa donde Whitey tuvo que adelantar su performance, para ver a Out Hud. Carpa que se quedó chica para la cantidad de gente que enganchó con su electrónica dance, tan cercana a !!! Concierto para que bailase toda la concurrencia. Lo que vino después ya solo fueron ráfagas e idas y venidas de uno a otro escenario. Los resucitados Gang of Four con su postpunk de onda dark ocuparon el escenario principal, ya ante un público bastante disperso. Curiosidad por ver a Oslo Telescopic en tal vez el mejor escenario del recinto (mas alejado, mas íntimo, pegado al mar), no resuelta al ocurrir otro cambio de horarios, que nos llevó a toparnos con un tal Daniel Darc poco innovador. A estas alturas, el cansancio sumado a un incidente con el camarada portugués, nos obligó a abandonar el festival, quedándome con la curiosidad de ver a la cantante de The Go!Team, que dicen estuvo misma cheerleader al frente de la banda. Lamento no haber podido ver a otras bandas de interés que también se dieron cita en el festival, como Broken Social Scene, Ron Sexsmith, Nouvelle Vague, Parker & Lily, The Married Monk, Tortoise y locales como Mercromina o Sr. Chinarro. Pero, muy en especial, una pena perderme a la banda escocesa The Wedding Present, vueltos a reunir, con discazo bajo el brazo, debido a que alguien tuvo el mal tino de poner en el mismo horario a Echo & The Bunnymen. Para otra vez será. Pero la colada no la repito, lo prometo.

* Para los que no sepan, Bauhaus y Nirvana solían ser las discotecas alternativas en Lima, manteniendo siempre la tendencia de la música new wave ochentera, en todos sus matices. Ahora solo subsiste la primera. La otra fue vilmente transformada en lavandería.

Miguel Guzmán, Pintor


Antecede al primer vistazo a sus obras, una absurda impresión sobre Miguel. Tomé medio segundo en imaginar sus cuadros llenos de flamingos, texturas y colores que harían al crítico referirse a la "calidez latina" de sus pinturas, la ingenuidad del hispano, Frida y la puta madre. Error, el artista trabajaba en acrílicos sobre imágenes digitales. Lo que es, Miguel tergiversa imágenes, subvierte el hecho y lo hace suyo. Miguel, en resumen, documenta.
La obra de Miguel es un cuestionamiento frontal, no a la libertad sino a su petrificada versión americana. Aquella mole que impone con aplomo sus valores morales, que encubre bajo su sombra los crímenes y tragedias de una guerra, no parece tener ojos para sus horrores.
La denuncia no sorprende por novedosa como por lúcida, a la precisión del ángulo con que enfoca la escena le sucederá el dramatismo de la gangrena, el óxido, la sangre. Lucidez difícil de mantener en la Florida del otro Bush, aquella de la parafernalia cristiana y la paranoia anti-musulmana.
Miguel expondrá en New York, su ciudad natal, en la semana del cuarto aniversario del 11 de setiembre, y acaso la Gran Manzana esté lista para escucharle.

La Electro-Conexión

Quisiera aportar este blog aun mequetrefon comentando sobre musica electronica. No escucho ya casi otros generos consumidos masivamente por la juventud de hoy. Por lo mismo, me dedicare mas bien a criticar y polemizar ya que poco es enchufable en el torrente terabatico de producciones que circulan.


Se me da por empezar con los mismisimos Aphex Twin, padres del electro moderno, a los que habria que quemarle sus Ambient Works II por haber plagiado de John Cage especificamente de "Music for Marcel Duchamp", pieza compuesta inicialmente para musica en un film.

Cage fue sin duda uno de los fundadores de la nueva musica, incluyendo la electronica. Su tecnica del piano preparado lo hizo famoso. Esta tecnica consiste en alterar la sonoridad de las cuerdas de un piano de cola de manera que pueda ser manipulada a dos manos y dar efectos sonoros de percusion. El resultado es sorprendente, especialmente en la pieza en cuestion. Esta pieza a su vez esta basada en armonias asiaticas, las pausas entre notas le dan esa atmosfera esquizoide.

Es inegable que la musica se recrea a si misma y que muchos copian o citan a otros, desde los mas grandes compositores de la historia hasta los mas insignificantes mezcladores en tornamesas de hoy. En este caso lo siento, deseo que el Sr. James quede electrocutado.

En realidad habia querido hablar sobre AFX ya que ha llegado a mis manos el triple de elepes Analord. El primero es sin duda distintivo, muy AFX. Los siguientes son ejercicios de ritmo en sintetizadores anticuados on purpose. El tufillo retro siempre vendera, aunque para los AFX eso no importa, cualquier cosa que produzcan sera consumida con fruicion por la horda de incautos que los consideran maestros.

La Secuencia Inicial

Como la marea que viene y va, suelo oscilar entre la obsesión de escribir algo y la desidia de corregirlo. Tengo una decena de artículos por corregir, un millar de ideas y muy poco tiempo libre. Pero empecé con esto. Sabe Dios si será un inicio mas sin terminar o un proyecto que llegue algo; por ahora bastará saber que somos cuatro, que nos gusta la música demasiado y que nos jactamos de ello. Y que queríamos que alguien mas allá, osea tú, nos lea.

Miro atrás y veo la razón: nunca fuiste una canción.