10 Años Atrás - Parte 2
RADIOHEAD - "OK Computer" (1997)/ Parlophone
Agotaba, en 1997, las veredas de San Isidro, caminando con algunas hojas en un folder que intentaban resumir quien era, y convencer a alguien que me pague un salario. 6 de la tarde, crushed like a bug in the ground. Mis viejos no detenían la crisis en el que habían caído, cada día era caída libre, y yo no podía evitarlo. hubiese querido fugar, despertar de una pesadilla con el alivio propio de saber que no era real, las lágrimas secas, la respiración exhausta; en vez de eso, vendieron la casa.
You know, you know where you are with/Floor collapsing, floating, bouncing back/And one day, I am going to grow wings/ A chemical reaction, hysterical and useless... Karma Police era una broma de la banda dicha cada vez que alguien hacía algo terrible: 'Don't worry, the Karma Police will get him". Era tambien una amenaza contra quienes se metieran con nosotros, y era tambien el single que mas sonó de aquel álbum. El efecto final de la canción, un amplificador quemándose con el insistente solo de Jonny, posible metáfora de la derrota de la máquina, se interrumpe para esuchar el reglamento de supervivencia de los androides paranoicos que veíamos todos los días: Fitter, happier, more productive... Electioneering fue volver al '68, las huelgas, los choques contra la policía, en palabras de Thom: "We live under a world banking system and media that make it almost irrelevant who is in power. Political systems worldwide are at the mercy of business and bullshit economies. I can't recycle any of the polythene packaging that fills my house. Why?" Una voz que, ademas, amenazaba estar dentro de tu craneo, en Climbing Up The Walls.
Puede un disco cambiarte la vida? Supongo que si tu vida es muy endeble para cambiar, en todo caso, tal vez no tenías las cosas claras. Este disco no me cambió nada, me reafirmó en lo que pensaba, me ayudó a seguir viviendo. Tirado por mucho tiempo en la vereda, cansado de lidiar con trabajos que te matan lentamente, entendí que OK, Computer, así es como serán las cosas. No alarmas, no sorpresas, por favor.
Pocas cosas quedan en la memoria que capturen un momento tan radical de mi vida, de mi generación y de esa época, pocas cosas como la guitarra de Jonny Greenwood y la voz de Yorke suplicando, en Lucky, que lo saquen del accidente aéreo, aquel que llegaría en años posteriores, y sin metáforas acá: a la velocidad en que viajábamos, la civilización tenía que colapsar. Paradójicamente, el disco termina implorando, Hey man, slow down, idiot, slow down.
No hace falta decir que no les hicimos caso.